Albóndigas caseras en salsa
Ingredientes:
- Carne molida (200 g)
- Pasta de tomate (200 g)
- Huevo (1)
- Miga de pan (200 g)
- Cebolla blanca (1)
- Dientes de ajo (2)
Otros ingredientes para sazonar:
- Tomillo
- Sal
- Pimienta
Si vas en búsqueda de recetas con carne picada, esta podría ser la preparación que necesitas, pues aprenderás cómo hacer albóndigas caseras que seguramente gustarán a cualquier persona.
Para esta receta de albóndigas en salsa será necesario utilizar una picadora de carne si no tienes carne molida. Además, debes saber que se trata de una preparación para 2 comensales.
Comienza picando finamente la cebolla y el ajo para empezar la receta sofriendo estos ingredientes. Cuando estos elementos ya estén dorados, retíralos del fuego para reservar.
Después de triturar la carne, en caso de que no esté molida y coloca los 200 gramos en un recipiente. Allí deberás empezar a sazonarla.
Las especias que recomendamos para la preparación son el tomillo, la sal y la pimienta. Sin embargo, el gusto es algo muy individual, por lo que puedes añadir más cosas como orégano o comino, por ejemplo.
Agrega el huevo a la carne y mezcla. Asegúrate que todos los elementos se integren de forma correcta. Después de esto, deberás incorporar la cebolla y el ajo hasta que todo esté bien mezclado.
Comienza a añadir el pan rallado para darle mejor consistencia a todo y procede amasando. El producto final debería ser fácil de moldear y manejar, y no debería pegarse a tus manos.
Como ya está lista la masa, ahora es momento de darle forma a las albóndigas. Por lo tanto, haz pequeñas esferas. Intenta que todas tengan el mismo tamaño para que tengan el mismo tiempo de cocción y, al terminar, reserva.
Ahora que las albóndigas están listas ya es momento de cocinarlas. Por lo tanto, deberás preparar la salsa para albóndigas. Para ello solo deberás colocar medio vaso de agua en una olla y añadir la pasta de tomate. Si lo deseas puedes salpimentar al gusto.
Añade las albóndigas, tapa la olla y deja que todo se cocine durante unos 25 minutos para que la carne quede bien hecha. Si crees que todavía le falta un poco de cocción después de que pase el tiempo, entonces ve revisando las albóndigas hasta que estén listas.
Ya con todo terminado es hora de servir las albóndigas. Elige el complemento que prefieras y sirve todo con un cucharón, pues así podrás conservar la mayor cantidad de salsa y evitar que esta se derrame al sacar las albóndigas de la olla. Después de este paso solo queda disfrutar.
Lo bueno de esta receta es que las albóndigas caseras pueden comerse con cualquier guarnición. Son excelentes para acompañar unos deliciosos espaguetis, una ración de arroz e incluso para comerlas con pan. Además, su versatilidad y buen sabor hace que sean un alimento exitoso con los más pequeños.
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